Uno de los platos más jugosos de los que pudimos disfrutar en la República Checa es este plato de redondo de cerdo.
En primer lugar nos encontramos en el centro del plato con unos magníficos y jugosos filetes de redondo de cerdo guisados a la cerveza.
En la derecha tenemos tres porciones de patata hervida, a modo de guarnición y dos rebanadas de masa de pan levemente cocidas.
En la izquierda nos encontramos con una cama de cebolla caramelizada y encima de ella un choricillo checo, una verdadera delicia debido a su compendio de especias.
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